Victoriano Crémer
Mantenedor 1993
Victoriano Crémer
Mantenedor 1993
Foto: Memoria Histórica del Festival Nacional de Exaltación del Botillo de Bembibre
En 1993 ejerció de mantenedor el burgalés, Victoriano Crémer Alonso. Poeta, novelista y ensayista que residió durante prácticamente toda su vida en León.
Durante su juventud trabajó como vendedor de periódicos, mancebo de botica, tipógrafo, locutor y hasta de periodista clandestino.
Publicó su primer poema con 16 años, en el semanario Crónica de León.
Durante la Guerra Civil Española se libró de la muerte en varias ocasiones, pero pasó por el campo de concentración franquista de San Marcos, en León. Fundador posteriormente, junto con Antonio González de Lama, Luis López Santos, José Castro Ovejero, Luis López Anglada, Antonio Pereira y el también poeta Eugenio G. de Nora, de la revista Espadaña. Publicación que sirvió de medio de expresión para muchos autores de la corriente llamada poesía desarraigada de posguerra.
Su obra abarca desde el existencialismo hasta las preocupaciones sociales, moviéndose entre la denuncia de la injusticia y el afán de solidaridad. También cultivó la narrativa, siempre con tintes sociales, en obras como Libro de Caín (1958) e Historias de Chu-Ma-Chuco (1970).
Foto: Memoria Histórica del Festival Nacional de Exaltación del Botillo de Bembibre
En 1993 ejerció de mantenedor el burgalés, Victoriano Crémer Alonso. Poeta, novelista y ensayista que residió durante prácticamente toda su vida en León.
Durante su juventud trabajó como vendedor de periódicos, mancebo de botica, tipógrafo, locutor y hasta de periodista clandestino.
Publicó su primer poema con 16 años, en el semanario Crónica de León.
Durante la Guerra Civil Española se libró de la muerte en varias ocasiones, pero pasó por el campo de concentración franquista de San Marcos, en León. Fundador posteriormente, junto con Antonio González de Lama, Luis López Santos, José Castro Ovejero, Luis López Anglada, Antonio Pereira y el también poeta Eugenio G. de Nora, de la revista Espadaña. Publicación que sirvió de medio de expresión para muchos autores de la corriente llamada poesía desarraigada de posguerra.
Su obra abarca desde el existencialismo hasta las preocupaciones sociales, moviéndose entre la denuncia de la injusticia y el afán de solidaridad. También cultivó la narrativa, siempre con tintes sociales, en obras como Libro de Caín (1958) e Historias de Chu-Ma-Chuco (1970).